El paisaje natural de Cuenca es particularmente adecuado para el descenso de barrancos. La provincia está llena de ríos y cañones que ofrecen una variedad de rutas para todos los niveles de habilidad. Ya  seas un principiante que busca una introducción segura y emocionante a este deporte, o un experimentado aventurero que busca un nuevo desafío, en Cuenca encontrarás una ruta adecuada para ti.

Algunas de las rutas de descenso de barrancos más populares en Cuenca son:

Barranco de los Cortados de Villalba

En esta ruta descenderemos por una impresionante garganta, con alta paredes de roca caliza, que nos descubre un capricho de la naturaleza.

La erosión que ha ido produciendo a su paso el río Júcar por esta zona nos permite disfrutar de un recorrido a lo largo de su cauce, atravesando divertidos toboganes, saltos, cascadas…

Sin apenas dificultad llegaremos a lugares que de ninguna otra manera se pueden visitar. Un recorrido ideal e inolvidable donde el disfrute y la diversión están asegurados.

Barranco de la “Hociquilla”(Portilla): 

Barranco técnico donde progresamos utilizando la técnica del rapel, este barranco es muy angosto y profundo, lo que crea dentro de él un bioclima característico.

A pesar de la variedad de rápeles es un barranco sencillo de duración media ideal para tener un primer contacto con las cuerdas y los rápeles, no superando los 12 metros el más alto. Es un barranco que la gran parte del año no lleva caudal lo que lo hace asequible para todos los públicos. Un descenso que merece la pena, aunque solo sea por visitar y disfrutar de sus umbrías y estrechos llenas de vida.

Barranco de la Hocecilla (Majadas):

Descenso para coleccionistas, se trata de un barranco completísimo de largo recorrido y repleto de preciosos rapeles desde 4m hasta los 14 metros, saltos, toboganes y muchísima vegetación. Sin duda la nota característica de este singular descenso lo pone su gran variedad, comenzando con un tramo abierto y frondoso, seguido por su paso estrella con una garganta muy cerrada custodiada por dos paredones de unos 30 metros, y finalizando con otro tramo abierto.

 Es un barranco ideal para grandes épocas de lluvia, ya que desagua muy pronto, debido a su pequeña cuenca de recepción. Si es primavera y necesitas esa dosis de montaña, esta es tu actividad.

Barranco de la Hoz Somera:

Sus características nos dejan varios rapeles de 8, 10, 12 y 16 metros, además de saltos, toboganes…. y unas vistas estremecedoras de las grandes paredes que protegen este paraje. Termina en el cauce del gran rio Guadiela, con un tramo completamente acuático.

Barranco de la Dehesa (Poyatos): 

Es uno de los descensos de barrancos más espectaculares de la provincia de Cuenca. Conocido como singular, por la cantidad de elementos creados por la erosión, entre ellos el más famoso y significativo de todo el recorrido, un rápel de 23 metros con parte en volado (sin tocar la pared).

Su largo recorrido y dificultad no impide que sea posible realizarlo por todos los públicos, siempre, desde luego, con las explicaciones, apoyo y orientaciones de nuestro guía especialista.